¿Qué cubren los seguros?

Manos cubriendo una familia de papel, así como el seguro cubre diferentes riesgos y protege a tu familia

Seguramente has escuchado algo llamado “cobertura de los seguros”. ¿A qué se refiere? Más allá de esclarecer un término o entender que los seguros se manejan por coberturas te ayudará a entender cuál es la función que tienen en la vida de los mexicanos, su verdadera utilidad y ventaja, así como la importancia de tener al menos uno. Veamos qué cubren los seguros.

Los seguros vs. los riesgos

El riesgo es parte de nuestra vida y aunque aprendemos a vivir con ellos, el peligro que representan está siempre latente.

Por ejemplo, trasladarte todos los días a tu trabajo implica exponerte a varios riesgos en el camino; viajar a otro estado o a otro país implica otros riesgos; conducir tu auto para visitar a tus parientes implica otros riesgos.

Todo cambia cuando los riesgos se materializan en eventos adversos reales e inesperados: un accidente, una enfermedad, un robo, un sismo, un fallecimiento inesperado, la pérdida de nuestros ahorros, etc. Muchos de esos eventos provocan algún tipo de daño en nuestro patrimonio o directamente a las finanzas.

Pero resulta que para recuperarnos del daño no solo necesitamos voluntad y esfuerzo: necesitamos dinero. Pagar los gastos generados. Sin embargo, te tenemos buenas noticias: no tienes que pagarlos tú solo, ya que para eso están los seguros.

Pero ¿cuáles gastos específicamente? ¿De cuáles riesgos? ¿Qué eventos sí te va a pagar y cuáles no? ¿Hay un tope? Es aquí donde cabe hablar de las coberturas.

Las coberturas

Ya vimos que los riesgos se pueden convertir en eventos adversos inesperados y estos generan gastos. Pero también vale decir que las aseguradoras clasifican los riesgos según su origen o sus consecuencias. Así, por ejemplo, tenemos riesgos causados por fenómenos meteorológicos, climáticos y geológicos (huracanes, inundaciones, granizadas, nevadas, sismos), pero también tenemos riesgos cuya consecuencia es generar daños a otras personas (responsabilidad civil).

Los seguros, entonces, para atender la mayor cantidad de riesgos posibles utilizan este tipo de clasificaciones y los agrupan en coberturas. La cobertura es una especie de riesgos paquetizados por los que sí te va a responder la aseguradora y por los que estás pagando.

Entonces, cuando tú contratas un seguro se dice que estás contratando coberturas. Es decir, estás pagando para que la aseguradora pague los daños generados por esos riesgos estipulados en tu cobertura en caso de que se conviertan en eventos adversos reales.

Por lo tanto, el tipo de seguro depende del tipo de riesgos ante los que quieras estar cubierto, así como sus respectivos gastos. Un seguro de auto va a cubrirte eventos necesariamente asociados a conducir y poseer un automóvil, por lo que su cobertura es completamente distinta a la de un seguro de casa habitación, cuyos riesgos están ligados a habitar y/o poseer una vivienda, o un seguro de gastos médicos mayores, que tiene que ver exclusivamente con gastos para la salud personal y familiar.

Sin embargo, el mismo tipo de seguro puede ofrecer diferentes coberturas en diferentes compañías, o incluso dentro la misma compañía de seguros. Esto se debe a que, como te comentábamos líneas más arriba, las coberturas son como paquetizados o combos, por lo tanto, tiene límites, es decir, incluye ciertas cosas y deja fuera otras. Con frecuencia, entre más amplio sea tu combo, es decir, entre más riesgos y gastos cubra, estará más protegido.

Conoce más sobre los tipos de seguro en:

Es por eso que dentro del seguro de auto escuchas que existe la cobertura básica, la limitada y la amplia, cada una ofreciendo una cobertura más alta que la anterior. Y en general así se manejan los seguros: diferentes coberturas te protegen frente a diferentes riesgos. Lo importante es que, a la hora de elegir, seas consciente de qué protección necesitas y cuál no.

La importancia de conocer las coberturas

Por eso es importante que conozcas la o las coberturas que te ofrece una compañía de seguros antes de contratarlo. Solo conociendo la cobertura sabrás si es lo que necesitas, si el seguro te queda corto o si vas a estar pagando de más por coberturas que no vas a necesitar.

Y más importante aún es que conozcas el alcance de la cobertura de un seguro que ya tengas contratado para evitar malos entendidos a la hora de solicitar el apoyo económico. Si un evento adverso no está contemplado dentro de tu contrato o póliza, es decir, queda fuera del alcance de tu cobertura contratada, acude con tu compañía de seguros para adicionar la cobertura que te brinde la tranquilidad que estás buscando.

En nuestro Directorio podrás encontrar los teléfonos de contactos de nuestras compañías de seguros agremiadas: /directorio-de-aseguradoras-asociadas/

 

Manos cubriendo una familia de papel, así como el seguro cubre diferentes riesgos y protege a tu familia

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *