84 Aniversario Breve historia del seguro en México y fundación de la AMIS

Breve historia del seguro en México y fundación de la AMIS

Hoy la AMIS cumple 84 años promoviendo el seguro y trabajando por una sociedad más resiliente y mejor protegida. La historia del seguro y la de AMIS están estrechamente relacionadas, de hecho, no se entendería una sin la otra.

La historia del seguro en México se remonta a tiempos coloniales y ha evolucionado significativamente hasta convertirse en una industria moderna y diversificada. Durante la época colonial, no existían compañías de seguros como se conocen hoy en día. Sin embargo, se empezaron a realizar algunas prácticas rudimentarias de aseguramiento, especialmente en el ámbito marítimo y comercial, donde se acordaban compensaciones en caso de pérdidas durante los viajes. Organizaciones religiosas y sociales, como las hermandades y cofradías, ofrecían formas tempranas de seguros, proporcionando ayuda económica a sus miembros en casos de enfermedad, muerte o desastre.

Siglo XIX

A mediados del siglo XIX, motivadas por la independencia de México y por la apertura del país al comercio internacional, se comenzaron a establecer las primeras compañías de seguros formales. Ejemplo de ello fue La Imperial, fundada en 1865, una de las primeras compañías de seguros establecidas en México y se enfocaba principalmente en seguros de vida y seguros contra incendios. 

Posteriormente se dio una sucesión de hechos que asentaron los seguros en nuestro país: en 1870 se regula en el Código Civil el Contrato del Seguro, en 1892 se promulga la primera ley que rige las compañías de seguros; en 1897 se funda la Asociación Mexicana de Agentes de Seguros contra incendio, la cual estaba formada por 17 aseguradoras.

Siglo XX: consolidación de la industria y fundación de AMIS

A principios del siglo XX, el sector asegurador comenzó a consolidarse con la aparición de más compañías nacionales y extranjeras que ofrecían una gama más amplia de productos de seguros, incluyendo vida, accidentes y automóviles.

En 1935, se creó la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF), encargada de regular y supervisar las actividades del sector asegurador en México. Este fue un paso crucial para establecer un marco legal y normativo para la industria. En 1937 se crea la Asociación Mexicana de Agentes de Seguros y en 1940 nace la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros, mejor conocida como AMIS.

Durante la segunda mitad del siglo XX, la industria aseguradora en México experimentó un crecimiento significativo, diversificándose en productos como seguros de salud, gastos médicos mayores, seguros de hogar, y seguros para empresas.

En 1982, durante una crisis económica, el gobierno mexicano nacionalizó la banca y parte del sector asegurador. Posteriormente, en los años 90, se llevó a cabo un proceso de privatización y liberalización que permitió la entrada de capital extranjero y la competencia en el mercado; además, las asociadas pudieron operar con la libertad de establecer sus propias tarifas y cuotas.

Siglo XXI

El siglo XXI ha visto una mayor integración de México en el mercado global de seguros. Las compañías de seguros internacionales han aumentado su presencia en el país, trayendo consigo nuevas tecnologías, productos innovadores, y estándares internacionales.

Con el avance de la tecnología, el mercado de seguros ha comenzado a digitalizarse, ofreciendo productos y servicios a través de plataformas en línea y aplicaciones móviles. Esto ha facilitado el acceso a seguros y ha mejorado la eficiencia en el servicio al cliente

Hoy en día, el mercado de seguros en México es dinámico y competitivo, con una amplia variedad de productos que van desde seguros tradicionales hasta coberturas especializadas. La industria sigue evolucionando, adaptándose a cambios demográficos, tecnológicos y económicos. Además, se enfrenta al reto de aumentar la penetración de seguros en el país, ya que aún una gran parte de la población no tiene acceso a productos aseguradores. La AMIS juega un papel clave para la industria en el país, porque además de que representa a sus asociadas ante las autoridades privadas y gubernamentales, su trabajo es indispensable para incrementar la penetración del seguro en la sociedad y para que cada vez más personas disfruten los beneficios de estar asegurado.

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